¿Cómo funciona el calentamiento por inducción?
La corriente alterna que circula por una bobina de inducción genera un campo magnético. La intensidad del campo varía en función de la intensidad de la corriente que atraviesa la bobina. El campo se concentra en la zona delimitada por la bobina, mientras que su magnitud depende de la intensidad de la corriente y del número de espiras de la bobina. (Fig. 1) Las corrientes de Foucault se inducen en cualquier objeto conductor de electricidad -una barra metálica, por ejemplo- colocado dentro de la bobina de inducción. El fenómeno de resistencia genera calor en la zona por donde circulan las corrientes de Foucault. Aumentar la intensidad del campo magnético incrementa el efecto de calentamiento. Sin embargo, el efecto de calentamiento total también se ve influido por las propiedades magnéticas del objeto y la distancia entre éste y la bobina. (Fig. 2) Las corrientes parásitas crean su propio campo magnético que se opone al campo original producido por la bobina. Esta oposición impide que el campo original penetre inmediatamente hasta el centro del objeto encerrado por la bobina. Las corrientes de Foucault son más activas cerca de la superficie del objeto que se calienta, pero su fuerza se debilita considerablemente hacia el centro. (Fig. 3) La distancia desde la superficie del objeto calentado hasta la profundidad en la que la densidad de corriente desciende a 37% es la profundidad de penetración. Esta profundidad aumenta en correlación con la disminución de la frecuencia. Por lo tanto, es esencial seleccionar la frecuencia correcta para alcanzar la profundidad de penetración deseada.